Es una de las iglesias de paso obligado para los peregrinos que siguen el Camino Inglés.

Ubicada en una ladera con vistas privilegiadas sobre la ría de O Burgo, conocemos la existencia de una iglesia anterior a la actual a través de un dibujo y sobre todo por el testimonio del Caballero de Almeiras, cuyo sarcófago descubierto bajo el coro del templo representa a un noble vestido con armadura y actitud orante. Está depositado en el Museo Arqueológico Provincial.

Aunque la iglesia actual fue construida en 1859, la mayor parte de la obra actual corresponde a la reconstrucción y reforma promovida por los feligreses tras el incendio del templo en 1936. 

Destaca por mantener una estética clasicista a pesar de su carácter funcional.